Descripción
Station, Russian Circles en estado puro
Tanto en el Rock como en el Metal, llevamos varias décadas donde las nuevas propuestas que surgen suelen pasar bastante desapercibidas. Es difícil encontrarte con material que realmente te sorprenda y se convierta en un imprescindible en la discografía de uno. El Post Rock, tampoco se libra se este estigma, ya que empezamos a notar que mucho del material que se va publicando hace demasiada referencia a discos anteriores. Se está convirtiendo en otro género predecible, pero como no, hay excepciones… Station es Russian Circles en estado puro.
Este disco sin duda para mi es así, refleja muchos de los aspectos que el Post Rock hace alarde, como jugar con las atmósferas, pero además aporta más energía, más fuerza.
Russian Circles es un trio guitarra/bajo/batería que a priori podría ser muy básico, pero consiguen sacarle mucho partido los tres miembros. Por un lado tenemos a Mike Sullivan a la guitarra el cual mediante loopers consigue generar texturas super interesantes, y riffs muy directos sin ser cargante. Después tenemos a Brian Cook al bajo, el cual tiene un estilo muy directo, donde sabe también aportar color a las armonías. Pero si hemos de desatacar un sonido en la banda, para mi sin duda es el de Dave Turncrantz. La batería de Russian Circles es la clave de todo, Dave saba jugar con la rítmica y el volumen sin acudir a efectos o técnicas complejas. Tiene una particularidad en la que utiliza los timbales en sustitución al doble bombo, por lo que marca una base sólida pero sin caer en los tópicos del Metal.
Ahora, lo que más me atrapa de este disco, más allá de los temas es la producción, creo que aquí el productor-ingeniero Matt Bayles hizo un trabajo increíble, porque cada instrumento suena muy separado y con una calidez soberbia.
Este disco, escucharlo en vinilo es realmente de otro planeta, suena contundente, directo, pero a la vez simple y crudo. Sin duda, toda una obra maestra.